martes, 15 de noviembre de 2011

Ritual para Atraer un Nuevo Amor

En ocasiones sentimos la necesidad de ver llegar nuevas sensaciones a nuestra vida: nuevos amigos, nuevas compañías, y nuevos amores que hagan que nuestro corazón sonría a pleno. Y en ello, a menudo acudimos a la espiritualidad para facilitar la llegada del amor a nuestras vidas. Pues hoy te contamos un sencillo ritual de amor, para abrir las puertas del corazón y despejar el camino, dejándolo libre de obstáculos, trabas y cierres.

Como siempre decimos, lo más importante a la hora de hacer rituales es llevarlos a cabo con el corazón puro y las mejores intenciones. De nada servirá hacer actividades o recitar plegarias que conjuren hechizos y confusiones: lo que aquí buscamos es abrir las puertas de nuestro corazón, para que la vida se encargue de hacer su trabajo.

Se trata, entonces, de rodearnos de energía positiva y de buenos pensamientos, para permitir que lo mejor de lo que nos rodea pueda llegar hasta nuestra alma.

Dicen los entendidos que el mejor momento para llevar a cabo rituales de amor es durante la fase lunar creciente, aunque también podemos realizarlo durante la luna Llena. De ser posible, realizaremos el ritual durante la noche de un día viernes, cuando las estrellas brillen con todo su fulgor.

Necesitaremos contar con una habitación tranquila y apacible, y ponernos en una mentalidad positiva y pacífica. Sobre una mesa o superficie, desplegaremos una tela de color rosado, y sobre ella dispondremos un cuenco o recipiente. Colocaremos dentro aceite de mirra, incienso y sándalo. Luego de mezclar los ingredientes, tomaremos una gota con los dedos y la colocaremos detrás de las orejas, en la nuca, en las manos (las palmas) y en los tobillos, como si se tratara de una colonia. Luego, usaremos esta misma mezcla para untar con ella tres velas verdes.

Prestando atención a los consejos de seguridad, colocaremos las velas sobre la mesa y las encenderemos, de a una, mientras repetimos la frase de elección por parte de quienes más saben de esto. La oración es la siguiente:

"Oh Venus, tu consuelo busco.
Se que envías a mí a la persona que me acompañara en mi viaje, pero mis ojos están ciegos para verla. En nuestro camino se levanta el polvo de la indiferencia y vuelve a cerrarse el corazón.

Oh, Venus, enseñame a encender la luz del sendero oculto.

A encontrar la llave que abra la puerta de la emoción compartida.

Oh, Venus, ilumíname con tu luz".

Repetiremos esta frase seis veces en total, mientras observamos arder la llama de las velas. Luego, dejaremos que las velas se consuman por completo, y terminaremos el ritual agradeciendo la posibilidad. Luego, retiramos los elementos y nos disponemos a esperar, con mucha confianza y fe, la llegada de un nuevo amor sincero a nuestras vidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario