Siempre es agradable que nos llamen por teléfono para saludarnos y preguntarnos cómo estamos, no obstante a veces ni siquiera queremos atender con tal que esa persona deje de molestarnos. Cuando alguien llama varias veces o simplemente no disfrutamos tener una conversación con un sujeto, no hayamos cómo hacer que deje de llamar. Siempre hay maneras de hacer que deje el fastidio, toma nota de los consejos que te damos.
Si a las tres de la mañana estamos en los brazos de Morfeo y nos levanta fulanita con ganas de "hablar un rato", lo que nos provoca es gritarle al oído unas cuantas frases amargas, pero las batallas también se ganan sin sangre. Por ende, lo básico es tener paciencia hasta que las llamadas se vayan haciendo cada vez más espaciadas.
En caso de que llame a una hora inadecuada, puedes decirle de manera amable que no te gusta atender el teléfono después de cierto momento. En caso de que te siga llamando tarde, cuando atiendas pregúntale la hora para que le dé vergüenza.
Si ya le has dicho en varias ocasiones que no está disponible para hablar, mantén una conversación con tu mamá mientras estás al teléfono. Con el tiempo se cansará.
Cada vez que llame, dile que tu teléfono está averiado y que no escuchas con claridad. Asegúrate de que repitas entre cuatro y cinco veces una frase.
Coméntale acerca de tus gustos costosos, lo mucho que te gusta ir a lugares donde se gaste mucho dinero y tu gran afición por recibir regalos de marca. Si no le ahuyentas, al menos la pasarás en grande.
Siempre habla acerca de tu ex. No hay nada más fastidioso que alguien que no pare de comentar todos los detalles de su "tortuosa" relación.
En caso de que salgan, pon cara de aburrido y manda muchos mensajes de texto, con esto obviamente se dará cuenta de que no la estás pasando bien.
Pon a tu hermanito o a alguien menor a hablar por el teléfono. No lo vuelvas a atender hasta que cuelgue.
En caso de que nada de lo anterior funcione, simplemente bloquea su número y caso resuelto
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